Presentación

Igualdad y Desigualdad en el debate político rioplatense (siglo XIX)

Carolina Bruna Castro

brunasoren@gmail.com

Universidad Austral de Chile. Valdivia, Chile

Gonzalo Bustamante

gonzalo.bustamante@uai.cl

Universidad Adolfo Ibáñez. Santiago, Chile

La Historia Conceptual es muestra del esfuerzo por la reflexión interdisciplinar. Esto es patente toda vez que puede ser incorporada por otras disciplinas, más allá de la mera historia, como un complemento en sociología para dar cuenta de los cambios conceptuales que la aceleración implica para la estructuración o la teoría crítica,1 como una alternativa para la filosofía política para comprender el papel de los conceptos desde una idea de lo político que excede la filosofía analítica y del lenguaje, como un complemento de la iconografía e historia del arte, lo cual ya se encuentra en el mismo Koselleck, desde su interés en el trabajo de Walter Paatz, sus contactos con la Warburg-Haus y Martin Warnke, son testimonio de ese giro pictórico subyacente en su obra.2

En su entrevista con Narr y Palonen,3 Koselleck indicará lo siguiente:

Por supuesto, mi semántica, mi iconografía e iconología se forman en paralelo. Lo que no es decible puede posiblemente ser decible, y lo que no es decible tal vez sea decible. Esta relación hace que mi enfoque se manifieste. Mis criterios de selección son importantes porque, al mostrar algo con su ayuda, es posible que simultáneamente lo silencie. Mostrar es siempre al mismo tiempo silenciar. Esto también corresponde a criterios de selección para conceptos fundamentales con una fuerza significativa similar. En esta medida, muchos elementos de semiótica, de semántica y de iconografía e iconología son legibles de manera análoga. A ella se puede vincular la cuestión de los umbrales comparativos en la evolución del culto a los monumentos y del lenguaje político. A finales del siglo XVIII y principios del XIX se aprecia inequívocamente un impulso democrático en el culto político a los muertos. La democratización del culto a los muertos es un proceso a largo plazo que se inició con la Revolución francesa y en cierto modo llegó a su fin después de la Segunda Guerra Mundial. Hasta la Segunda Guerra Mundial, todos los símbolos y monumentos funerarios, monumentos admonitorios y sitios de memoria estaban orientados hacia el establecimiento de significado. […] En cualquier caso, el culto a los muertos debía establecer un significado para el espectador. Cualquier paisaje iconográfico tiene ahora como tema principal la imposibilidad de establecer un sentido. En su conjunto, los monumentos dedicados al Holocausto tienen como tema el absurdo como tal.

Koselleck establece un vínculo respecto de la semántica y la iconología. Como ha notado Hubert Locher,4 lo particular de la preocupación y aproximación de Koselleck a lo genuinamente pictórico lo que caracteriza su interés por la imagen como cuestión política y eso lo distingue de la investigación de Martin Warnke sobre Iconografía Política, debido a que para él (Koselleck) la imagen puede tener un efecto político no solo a través de un mensaje visualmente explícito, sino también a través de lo que no muestra, sino que oculta, a través de lo que lleva consigo como connotación.

Como ha mostrado Falko Schmieder,5 la preocupación por las imágenes en la historia conceptual no se reduce a la persona de Koselleck, sino que es una constante de la Begriffsgeschichte en general. Podríamos indicar que en la llamada Escuela de Cambridge ocurre algo similar, al menos en su figura más destacada, Quentin Skinner, quien en sus últimos trabajos combina el giro retórico con el pictórico.

Para Koselleck, se puede pensar más rápido en imágenes que en palabras. Hay un nivel de pensamiento sin palabras, el pensamiento se desliza de imagen en imagen, saltando tan rápido como las imágenes que aparecen ante el ojo: ahí no hay control sobre la “pronunciabilidad”. Aquí está el punto de entrada para el mundo moderno de los íconos políticos, que rodea los campos de visión (anuncios, carteles, pancartas: ¡una imagen antes de que sea una oración!).

Quizás, eso que notó Koselleck, ya sea posible rastrearlo en el trabajo de Thomas Hobbes y su representación del Estado moderno en el frontispicio del Leviatán. Es por eso, que hemos incluido un trabajo de Mónica Brito Vieira,6 quien deconstruye el significado simbólico del Leviatán para reconstruirlo en artistas contemporáneos. Desde los trabajos artísticos de Do Ho Suh y Ernesto Neto, Brito Vieira propone vías de re-imaginar reconceptualizaciones del cuerpo político a partir de la iconografía del Leviatán.

En sus trabajos, Frank Ankersmit7 ha destacado el carácter estético tanto de la política en general como de la representación en particular. En el trabajo que presenta en este volumen, muestra la tensión conceptual existente desde los orígenes de la modernidad entre soberanía y representación política. Es una reconstrucción que desafía y complementa la realizada por autores como Giuseppe Duso,8 Elías Palti,9 y el mismo Koselleck.10

Incluimos también en este dossier trabajos que indagan respecto del lenguaje, podríamos decir bajo el eje representación, política y lenguaje. En el caso de Ingrid Sánchez relativo a la literatura y la metáfora en el contexto del siglo XIX francés, que da muestra del uso interdisciplinar de la historia conceptual también en el campo de la literatura. También el artículo de María Pía Lara que indaga respecto de los peligros y metas de las guerras políticas, en relación al uso de los conceptos. María Pía Lara invita a considerar la historia de los conceptos también en relación a propuestas como la de Wittgenstein relativa a los juegos de lenguaje a la hora de considerar el uso que realizamos de los conceptos políticos.

Se podría decir además que, esta edición complementa el trabajo que realizamos como editores del libro Historia Conceptual Politización de una Teoría,11 en el que pese haber intentado establecer diálogos entre propuestas diferentes, podríamos decir entre la tradición anglosajona como continental quedábamos aún en deuda respecto de quienes fueron consideradas y considerados para el volumen. Logramos en el trabajo de edición que se presenta en este número salir de una edición masculinizada en la que además la presencia latinoamericana es evidente.

Buenos Aires, 28 de octubre de 2023


1 Ver Rodrigo Cordero. “The Temporalization of Critique and the Open Riddle of History: On Reinhart Koselleck’s Contributions to Critical Theory”, Thesis Eleven, Vol. 137, Nº 1, pp. 55–71.

2 Ver Falko Schmieder. “Ikonologische Transgressionen der Begriffsgeschichte und ihre Historischen Motive im Vergleich 1930/1970”, E-Journal, Vol. 7, Nº 1, 2018, pp. 44–49.

3 Kari Palonen y Wolf-Dieter Narr. “Zeit, Zeitlichkeit und Geschichte. Reinhart Koselleck im Gespräch mit Wolf-Dieter Narr und Kari Palonen”, en Kari Palonen y Jussi Kurunmäki (eds.): Zeit, Geschichte und Politik. Jyväskylä, Jyväskylän yliopisto, 2003, pp. 9–33. Ver también Faustino Oncina Coves. “Memory, Iconology and Modernity: A Challenge for Conceptual History”, en Javier Fernández Sebastián (ed.): Political Concepts and Time. New Approaches to Conceptual History. Santander, Cantabria University Press/McGraw-Hill, 2011, pp. 305–344.

4 Ver Hubert Locher. “Spuren der Geschichte im Bild. Zum Interesse der Kunstgeschichte am politischen Bild in Kosellecks Umfeld”, en Bettina Brandt y Britta Hochkirchen (eds.): Reinhart Koselleck und das Bild. Bielefeld, Bielefeld University Press, 2021, pp. 161–184.

5 Ver Falko Schmieder. “Ikonologische Transgressionen der Begriffsgeschichte…”.

6 Mónica Brito Vieira se especializa en historia del pensamiento político y teoría política normativa. PhD. en historia del pensamiento político (Cambridge, 2005). Presidenta de la European Hobbes Society. Ha impartido cursos sobre Reinhart Koselleck. Autora de: The Elements of Representation in Hobbes: Aesthetics, Theatre, Law and Theology in the Construction of Hobbes’s Theory of the State (2009) y co-autora (con David Runciman) de Representation (2008).

7 Frank Ankersmit es profesor emérito de historia intelectual y filosofía de la historia en la Universidad de Groninga (Holanda). Es uno de los filósofos de la historia vivos más destacados. Recibió la medalla de honor de la universidad. Miembro de la Real Academia de Ciencias de los Países Bajos. Obtuvo su doctorado con la tesis Narrative Logic (1983). Entre sus publicaciones se cuentan: The Navel of History (1990), The Historical Experience (1993), History and Tropology (1994), Aesthetic Politics (1997), Historical Interpretation (2001) y Political Interpretation (2002).

8 Ver Giuseppe Duso (ed.). El poder. Para una historia de la filosofía política moderna. México, Siglo XXI, 2005.

9 Ver Elías Palti. Una arqueología de lo político. Regímenes de poder desde el siglo XVII. Buenos Aires, Fondo de Cultura Económica, 2018.

10 Ver Reinhart Koselleck. Crítica y crisis. Un estudio sobre la patogénesis del mundo burgués. Madrid, Trotta-UAM, 2007.

11 Ver Carolina Bruna y Gonzalo Bustamante (comps.). Historia conceptual y politización de una teoría. Valencia, Tirant Humanidades, 2021.