Dra. María Laura Garrigós1
Es un honor para mí introducir el primer número de la revista Estudios Sociales sobre Derecho y Pena en el marco del relanzamiento de esta histórica publicación del Instituto de Criminología (Servicio Penitenciario Federal – CONICET).
Para comprender el valor del trabajo de recuperación editorial llevado adelante, vale recordar que el Instituto de Criminología fue fundado en 1907 como una oficina de asesoramiento técnico y administrativo, cuya función principal era el “estudio científico de los penados” dentro de la Penitenciaría Nacional. Sus objetivos, en aquel entonces, giraban en torno a informar a la justicia, servir como insumo experto y operar con fines clasificatorios y terapéuticos sobre la población detenida. Más allá de estas funciones principales, también tenía a su cargo actividades de corte académico, como la organización de una Biblioteca Internacional de Criminología y Ciencias Conexas; la preparación del primer Museo de Criminología de América del Sur y la publicación de una revista de corte netamente científico.
La revista se editó por primera vez con el nombre Archivos de Criminología, Medicina Legal y Psiquiatría bajo la dirección de José Ingenieros –el primer director del Instituto– siguiendo los pasos de la revista Criminología Moderna fundada por Pietro Gori. Durante todo este período, la revista salió bimestralmente y a partir de 1908 se imprimió en los Talleres Gráficos de la Penitenciaría Nacional. En 1914, cambió su director y por primera vez se presentó como “órgano del Instituto de Criminología de la Penitenciaría Nacional”, pasando a llamarse Revista de criminología, psiquiatría y medicina legal, pero conservando el mismo formato que su versión anterior (Miceli, 2006).
Hasta aquí la revista del Instituto de Criminología se dedicaba a debatir ideas criminológicas de la época y a difundir las actividades e historias clínicas de internos alojados dentro de la Penitenciaría Nacional. De hecho, la mayoría de los autores que publicaban allí trabajaban o habían trabajado en dependencias encargadas de la gestión de prisiones, comisarías, hospitales y escuelas; sin embargo, al mismo tiempo la revista contaba con una importante inserción en espacios académicos como universidades y academias científicas.
A partir de 1935, con la creación de la Dirección General de Institutos Penales, se reorganizó la gestión penitenciaria general y el Instituto sufrió algunas modificaciones estructurales. La Sociedad Argentina de Criminología y la Sociedad de Psiquiatría y Medicina Legal de La Plata comenzó a editar la revista, aunque su impresión se mantuvo en los talleres gráficos de la agencia penitenciaria. Durante este período, la publicación sostuvo su bimestralidad con nuevo nombre: Psiquiatría y Criminología: revista de psiquiatría clínica, biología criminal, psicopatología general, higiene mental y medicina legal. En el mismo período, aparecieron otras publicaciones relativas al estudio científico de la criminalidad, incluso dentro de la misma institución penitenciaria. Tal fue el caso de la Revista Penal y Penitenciaria fundada en 1936 con el fin de difundir trabajos y actividades penitenciarias, censos y estadísticas a nivel nacional (Miceli, 2006).
A pesar de los distintos cambios institucionales, la revista se publicó de manera ininterrumpida hasta 1950.
El Instituto de Criminología funciona actualmente como órgano científico técnico del Servicio Penitenciario Federal y depende directamente de la Dirección Nacional (DN) desde el año 2014. Tiene como misión principal del Instituto realizar estudios e investigaciones para construir conocimiento basado en evidencia empírica, que sirvan para sustentar las estrategias y planes de gestión de la DN. Orienta sus resultados a la toma de decisiones ejecutivas en torno al diseño e implementación de políticas públicas en materia penitenciaria y propende a la colaboración con otras áreas de gobierno vinculadas a la inclusión social postpenitenciaria, la seguridad ciudadana y la política criminal. A partir del año 2020, se ha establecido un acuerdo de cooperación entre el Servicio Penitenciario Federal y el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), formalizado a través de un convenio en mayo de 2021, cuyo objeto es convertir al Instituto de Criminología en lugar de trabajo de investigadores/as y becarios/as del organismo a fin establecer vínculos para el desarrollo científico y tecnológico.
A sabiendas de que la revista del Instituto de Criminología se trata de la publicación con mayor tradición y permanencia institucional en el campo de los estudios relacionados a la prisión y el fenómeno del delito con más de 50 años de continuidad de itinerarios y persistencia temática, hemos propiciado su recuperación y relanzamiento ahora bajo el nombre de Estudios Sociales sobre Derecho y Pena.
Su publicación semestral y digital es posible gracias a la articulación entre el Instituto, la Escuela de Humanidades de la Universidad Nacional de San Martín y el CONICET. La revista está alojada en el Laboratorio de Investigación en Ciencias Humanas (LICH/EH-UNSAM/CONICET). Esperamos que esta publicación sea un recurso valioso para el intercambio, la producción y reflexión, desde diversas perspectivas y disciplinas de las ciencias sociales y humanas, sobre las complejas tramas que configuran las prácticas producidas en los campos del derecho penal y la ejecución de la pena; al tiempo que promueva la colaboración y participación del personal penitenciario en la recuperación la agenda académica y de investigación.
miceli, c. m. (2006). “José Ingenieros y los Archivos de criminología.” XIII Jornadas de Investigación y Segundo Encuentro de Investigadores en Psicología del Mercosur. Facultad de Psicología, Universidad de Buenos Aires.
1Subsecretaría de Asuntos Penitenciarios. Ministerio de Justicia y DDHH de la Nación