Reseña

Plataformas de empleo y transformaciones del mundo del trabajo en un contexto de pandemia

Osvaldo Battistini y Rodrigo Carmona (coordinadores)

Ediciones UNGS, 2021, 100 páginas

ISBN: 978-987-630-581-5

Ignacio Garay1

El libro Plataformas de empleo y transformaciones del mundo del trabajo en un contexto de pandemia es una investigación que aborda el impacto de las plataformas de trabajo en ciudades argentinas en el contexto de la crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19. Consta de una presentación a cargo de Rodrigo Carmona, una introducción de Osvaldo Battistini y cuatro capítulos donde también participan Bárbara Couto, Andrea Iren, Sonia Filipetto y Pablo Míguez.

El libro recoge la preocupación por el avance de las plataformas de trabajo, con especial interés en aquellas de traslado de personas y reparto a domicilio. El análisis empírico se centra en el conurbano bonaerense y en una ciudad santafesina. A partir de investigaciones desarrolladas por el equipo en contextos anteriores y simultáneos a la pandemia, los debates teóricos sobre el capitalismo cognitivo, el trabajo inmaterial y el futuro del trabajo se unen con la especificidad de las condiciones sociales y laborales de las/os trabajadores/as de plataformas en las ciudades abordadas.

En el capítulo Trabajo y plataformas. Emergencia, auge y consolidación de su dinámica en la crisis del COVID-19, Pablo Míguez y Sonia Filipetto ubican al lector/a en las coordenadas teóricas y contextuales del libro. Los autores retoman a los teóricos del capitalismo cognitivo para resaltar la principal característica de las plataformas: la captura y valorización de datos digitalizados, que son generados en la interacción social. En diálogo con la tesis de Nick Srnicek en Capitalismo de Plataformas (2018), la crisis financiera a nivel global de fines de la década del 2000 redireccionó el capitalismo, enfrentado entonces a una caída en la rentabilidad industrial, hacia la extracción de datos. Las plataformas funcionan como el modelo propio del capitalismo contemporáneo, ya que son capaces de capturar una miríada de datos que a diario producen usuarios, consumidores y trabajadores. Como señalan los autores, las plataformas conjugan la apropiación de la producción social inmaterial con la materialidad de activos infrautilizados, pasibles de devenir espacios productivos: el dormitorio sin uso en Airbnb o el asiento vacío en Uber. En el caso de América Latina, Míguez y Filipetto explican el valor central que tuvieron las plataformas dedicadas al reparto y la movilidad, ya que la región vio surgir tempranamente a la empresa Pedidos Ya (en 2009), y más tarde a la colombiana Rappi (en 2015).

En Plataformas de empleo. Trayectorias laborales y de movilidad de les jóvenes en el Área Metropolitana de Buenos Aires, Bárbara Couto y Rodrigo Carmona describen las características del trabajo comandado por plataformas en el AMBA con énfasis en las de reparto y de traslado de personas. A partir de una investigación situada en el escenario de prepandemia –fines de 2019– y en la propia crisis sanitaria, los autores muestran que los/as jóvenes trabajadores/as de sectores urbanos hallaron en estas plataformas un refugio ante un proceso de creciente desocupación y precarización de las condiciones de trabajo. Al analizar las trayectorias socioeducativas y laborales de los/as repartidores/as de plataformas en el AMBA, Couto y Carmona detallan las características de la fuerza laboral de estas empresas: son principalmente jóvenes, con fuerte presencia masculina y migrante. De manera virtuosa, el capítulo ofrece un análisis sobre los ingresos diferenciales percibidos por quienes utilizan como principal herramienta de trabajo un auto (Uber), o una moto o una bicicleta (Pedidos Ya, Glovo, Rappi). Asimismo, se advierte que las mujeres obtienen menores ingresos que sus pares varones porque utilizan en mayor proporción la bicicleta en el reparto y, en el caso del traslado de personas, hacen menos uso de los horarios nocturnos con tarifas más elevadas debido a las responsabilidades de cuidado. De este modo, el capítulo invita a pensar las desigualdades que se producen al interior de cada plataforma y los factores que las explican, superando visiones monolíticas.

En el capítulo Plataformas digitales e impactos recientes en materia laboral en la ciudad de Rafaela, Rodrigo Carmona, Bárbara Couto y Andrea Iren indagan las plataformas digitales de empleo en la ciudad de Rafaela, provincia de Santa Fe. Lo hacen a partir de entrevistas realizadas a trabajadores/as e informantes claves entre fines de 2020 y principios de 2021, focalizados en Pedidos Ya y en dos plataformas de capital y desarrollo locales: Flaming y Quiero Trabajo Ya (esta última no está dedicada al reparto a domicilio, sino que funciona como mediadora entre oferta y demanda de trabajo en la ciudad). Al presentar una comparación entre las plataformas desarrolladas localmente y Pedidos Ya, el capítulo resulta interesante para el lector/a, en la medida en que deja indirectamente planteada la posibilidad de desarrollar, promover y sostener en el tiempo un modelo distinto de plataformas. Si bien Pedidos Ya supera a su competencia, Flaming, tanto en volumen de operaciones como en cantidad de repartidores, lo cierto es que esta última presenta relaciones menos impersonales entre dueños y trabajadores/as, basadas principalmente en la confianza, por ejemplo en la instancia de reclutamiento, donde adquieren mayor peso las recomendaciones de conocidos. Los autores sostienen que estas relaciones que operan en la plataforma Flaming implican un ejercicio menos estricto de control sobre la organización del trabajo que la gestión algorítmica de Pedidos Ya, aunque exista una continuidad en términos de falta de reconocimiento de la relación laboral y la consecuente desprotección que supone estar inscripto en el régimen del monotributo en lugar de ser un empleado dependiente.

El último capítulo, elaborado por Osvaldo Battistini, discute en qué medida las plataformas digitales de reparto aportan una novedad en el mercado de trabajo argentino. El autor argumenta que, aunque las características de la gestión del trabajo a partir del desarrollo tecnológico son efectivamente una innovación, las condiciones en las cuales se desarrolla la actividad de delivery no conforman una novedad para sus trabajadores/as. En primer lugar, Battistini realiza un vasto repaso histórico del envío de productos o mensajes, donde conecta cronológicamente los primeros antecedentes de la actividad (antiguo Egipto, Persia, Grecia), los servicios de entrega a domicilio de alimentos a comienzos del siglo XIX, a los “dependientes” de los negocios barriales del conurbano bonaerense y a los cadetes de las oficinas a mediados del siglo XX. De esta manera demuestra las diversas funciones, formas y características que tomó el reparto a domicilio, respondiendo a las necesidades económicas y sociales de cada época. Situado ya en el siglo actual, se adentra en el análisis de una forma de trabajo que caracteriza como “normalmente precaria” (p.74). A partir de investigaciones previas desarrolladas por el autor entre 2008 y 2009 en las ciudades de La Plata y Buenos Aires, señala que los deliveries fueron históricamente el eslabón más descuidado por los locales de comidas a domicilio. En efecto, en aquella investigación Battistini había encontrado una fuerza de trabajo contratada informalmente, en muchos casos de varones migrantes sin radicación legal en el país, expuestos a muy bajos ingresos -justificados a partir de la consideración de las propinas como parte del salario-, nula cobertura frente a accidentes, gastos de mantenimiento de las motos (propias) e incluso situaciones de discriminación. De este modo, el capítulo insiste en la persistencia de la precarización laboral para esta actividad. Finalmente, Battistini aborda las condiciones socioeconómicas al momento del arribo y consolidación de las plataformas de reparto en Buenos Aires (2017-2019), y afirma que estas empresas hallaron un terreno favorable, ya que para entonces el país exhibía una tasa de desocupación de dos dígitos, un aumento de la subocupación demandante y un crecimiento del empleo no registrado, en simultáneo con una fuerte corriente migratoria desde Venezuela. En este escenario, trabajar como repartidor se volvió una posibilidad asequible, con muy bajas barreras de ingreso para quienes necesitaban complementar sus salarios o procurar un trabajo de forma rápida. A modo de síntesis, este capítulo de cierre del libro busca demostrar que las plataformas de reparto en Argentina encontraron un mercado de trabajo favorable para su instalación y se montaron sobre condiciones propias de la actividad que, incluso una década antes de su llegada, ya eran inestables y con pocas protecciones para los trabajadores. Aunque no se adentra en el escenario específico de la crisis sanitaria del COVID-19, aporta elementos centrales para comprender cómo estas plataformas devinieron una alternativa atractiva para personas jóvenes, migrantes o desocupadas. Tomando prestada una expresión del libro: “el trabajo menos malo entre los malos” (p.18).

En definitiva, este libro recoge preguntas y hace reflexiones que resultaron urgentes en su contexto de producción y publicación, cuando las medidas de aislamiento implementadas para reducir los contagios permitieron a las plataformas de comercio electrónico, transporte de pasajeros y delivery crecer de modo exponencial y “desacoplarse de las consecuencias derivadas de la crisis e incluso beneficiarse de ella” (p.35). Al mismo tiempo, los/as autores/as insertan a la obra en debates más extensos, previos (y posteriores) a la crisis sanitaria. De este modo, interrogantes como el futuro del trabajo, las transformaciones resultantes del avance tecnológico, las nuevas configuraciones identitarias, y los dilemas que las plataformas plantean a la organización colectiva de los trabajadores atraviesan estas páginas y convocan a nuevas ideas en un debate aún abierto.


1 Escuela Interdisciplinaria de Altos Estudios Sociales, Universidad Nacional de San Martín.